De la ciudad moruna
tras las murallas viejas
yo contemplo la tarde silenciosa,
a solas con mi sombra y con mi pena.
El río va corriendo,
entre sombrías huertas
y grises olivares,
por los alegres campos de Baeza.
Tienen los vides pámpanos dorados
sobre las hojas cepas.
Guadalquivir, como un alfanje roto
y disperso, reluciente y espejea.
Lejos, los montes duermen
envueltos en la niebla,
niebla de otoño, maternal;descansan
las ruedas moles de su ser de piedra
en esta tibia tarde de noviembre,
tarde piadosa, cárdena y violeta.
El viento ha sacudido
los mustios olmos de la carretera,
levantando en rosados torbellinos
del polvo de la tierra.
La luna está subiendo
amoratada, jadeante y llena.
Los caminitos blancos
se cruzan y se alejan,
buscando los dispersos caseríos
del valle y de la sierra.
Caminos de los campos...
¡Ay, ya no puedo caminar con ella!
me ha gustado mucho esta poesia
ResponderEliminar¿De dónde habeis sacado estas poesías?,a mí me han gustado mucho.
ResponderEliminarAndres esta poesia la hemos copiado de un libro que había en clase o de alguna casa.A mí también me gusta.Podeís proponer alguna idea para que a sí este el blog a gusto de todos.Que no os de vergüenza.
ResponderEliminarAndres esta poesia la hemos sacado de un libro que creo que esta en clase o si no es de clase de alguna casa.Si a mi también me gusta.
ResponderEliminarEsta muy bien esta poesía,cada vez teneis más puesto esta muy bien el trabajo que estais haciendo
ResponderEliminarSí amí me ha gustado mucho esta poesía y el libro está en clase asique si alguien quiere leer alguna de estas poesías que lo coja de la biblioteca de clase.
ResponderEliminar