lunes, 22 de febrero de 2010

TUS CINCO TORITOS NEGROS POR JAVIER S.

TUS CINCO TORITOS NEGROS



Escrito por el poeta Manuel Benitez Carrasco.
Porque cuando de verdad existe amor... No existen
barreras que obstaculizen el camino... Porque el amor
siempre puede con todo y ante todos!

"En contra de mis cinco sentidos, tus cinco toritos negros!!!
Torito Negro: Tus ojos
Torito Negro: Tu Pelo
Torito Negro: Tu boca
Torito Negro: Tu beso
Y el más negro de los cinco: Tu cuerpo. ¡Torito negro!
Barreras le puse a mis ojos, para que nunca más volvieran a verte,
y tus ojos me las rompieron!
Barreras le puse a mi boca para que callara tu nombre, y tu boca las hizo polvo!
Barreras puse a mi beso.... Tu boca les prendió fuego!
Barreras puse a mis manos... Las volvió sombra inmensa tu pelo!
Y para refrenar mi cuerpo, barreras puse de espinas, y las saltó por encima
tu cuerpo... Torito Negro....

Y luego, monté mis ojos en un caballo de miedo...
Tus ojos corriendo me perseguian, como dos toritos negros!
Y luego metí mis manos en un embozo de fuego... Tu pelo me acorralaba más y más,
¡igual que un torito negro!

Y luego, pegué mi boca contrá la cal de su encierro,
tu boca me excitaba, tu boca me provocaba, igual que un torito negro!

Y luego, mordí mi almohada fuertemente para poder contener mi apasionado beso,
pero... Tu beso se me insinuaba, igual que un torito negro!

Y después, arañé mi carne de locura, tentación y deseo...
Y tu cuerpo encandilado, mimbre, luna, bronce y fuego, en la oscuridad de la noche
me acechaba, igual que un torito negro!

El aire de mi cuarto, estaba temblando con tu recuerdo. Cien caballos en mis venas,
al galope por todo mi cuerpo! Y yo... Jinete sin riendas, luchando inutilmente por
detenerlos.
Cien herreros en mi boca, fabricándome los besos! Y yo...Queriendo ser fragua
para poder deshacerlos.
Cien voces en mi garganta, gritando fuertemente: Que yo te quiero, que yo te quiero!!!!!
Y yo... Queriendo engañarme repitiendo:
NO TE QUIERO, NO TE QUIERO, NO TE QUIERO, NO TE QUIERO!!!

Salí a tomar aire al balcón, me tropecé con el cielo.
Aquel cielo quieto y hondo, verde, blanco, azul y negro.
Igual al de aquella noche que me salieron al paso tus cinco toritos negros.

Y me acordé de aquel viento que jugaba cariñosamente con tu pelo,
como al niñito que le gustan los caracolitos negros.

Y me acordé de aquel rayo de luna, fino y torero,
que puso dos banderillas de luz en tus lindos ojos negros.

Y me acordé de aquel llanto, y de aquel intenso dolor
en mis labios que nos quedó de aquel apasionado beso....
De aquel dolor en los brazos y de aquel profundo dolor en los huesos....
Y de aquella caracola que quedó dentro de mi pecho,
como un mar de amor dormido que ocultaba muy dentro:
"Yo te quiero"!

Y ya nunca más monté mis ojos en un caballo de miedo,
y ya no metí mis manos en un embozo de fuego, y ya no
pegué mi boca contra la cal de su encierro, y ya no
mordí mi almohada para poder contener mi beso, y ya no
arañé mi carne de locura, tentación y deseo.

Y de nuevo, aquel dolor de brazos, cintura y huesos!
Sin poder contenerme, tuve que gritar: TE QUIERO!
Que aunque no deba ...TE QUIERO!
Que aunque no pueda...TE QUIERO!
Que aunque seas ajeno... TE QUIERO!
y aunque en cuna de tu casa, meciendo estés dos
pequeños, y aunque nos pongan barreras de zarzamora y
sarmiento, para que no puedan saltarlas tus cinco
toritos negros:
Torito Negro: Tus ojos
Torito Negro: Tú pelo
Torito Negro: Tú boca
Torito Negro: Tú beso

Y el más negro de los cinco: Tu cuerpo, torito negro...

TE QUISE SIEMPRE!
TE QUISE!
TE QUIERO SIEMPRE!
TE QUIERO!! "

Un vídeo donde recita el poema el propio autor: Manuel Benítez Carrasco.

1 comentario:

  1. Esta poesía me gustó mucho cuando la ví, por eso la recité en la grabadora.

    ResponderEliminar